Jardín saludable: Más hojas significan menos aumento del tan trillado calentamiento global, menos enfermedades, retención de humedad, por ende menos calor, más almacenamiento de dióxido de carbono ( etc.) y con ello menos inestabilidad climática, menos calor, menos fenómenos climáticos extremos, más oxígeno, menos dolor de cabeza, menos polvo que daña aparatos, telas, libros, ojos de mascotas… ¡No es al revés, como se suele pensar en el oriente boliviano!! Más hojas, más salud, menos trabajo luego, menos depreciación de inmuebles, de barrios, menos aumento de la canasta familiar, menos enfermedades, menos bajas médicas en el trabajo, más turismo, más ingresos, más producción agropecuaria, más productos maderables, en fin: más hojas, más árboles GRANDES, menos cemento significan menos viento, menos polvo, menos gastos a mediano y largo plazo, más salud, menos gastos para alimentación por menos sequías y fenómenos climáticos extremos, etc.
Conclusión: pique el cemento de su patio, déjelo nada más que donde es necesario transitar y deje que crezcan los árboles, no se moleste con barrer, eche las hojas al jardín ( ¡HAGA COMPOST!) y pronto no tendrá polvo, dolor de cabeza ni sequías, surazos que matan y exagerados ni canastas familiares excesivamente caras en comparación con antes, menos dolor de cabeza y sus mascotas estarán más saludables.
Y de paso, tendrá más salud, menos polvo en la casa, más aire en los pulmones y la mente más clara por más oxigenada.
Las hojas „almacenan calor“ y calman el viento por tener un efecto de aire acondicionado, son nutrientes para el suelo que evitan la desertificación y se „tragan“ el calentamiento global, anulándolo. Ni qué hablar de que enfriarán su casa, bajando o reduciendo considerablemente el uso de electricidad para enfriar la casa. El mismo suelo almacenará „calor“ en forma de dióxido de carbono y el follaje vivo del árbol producirá un efecto de arie acondicionado, le evitará polvo, sequías, etc.
Al no dejar que la naturaleza funcione a su manera, la asfixiamos – el planeta vive de la respiración que le cortamos al sellar el suelo con cemento y al talar sus árboles – que deben crecer dónde necesiten establecerse, reduciendo su espacio vital solamente en casos de extrema necesidad.
Al quemar o chaquear ramas, hojas, restos vegetales causamos sequías, polvaredas, dióxido de carbono y un aumento del „calentamiento global“, aumento de la canasta familiar indirectamente, desequilibramos el sistema de alimentación y refrigeración del planeta cuyios huéspedes somos.
Además las hojas son el alimento del suelo y de las raíces – si se queman, el suelo y las plantas no comen y, a cambio de ello, el calor producido lleva a fenómenos climáticos extremos ( vientos, etc.) a enfermedades ( cutáneas, etc.) y a sequías ( ver huracán Katrina el 2005 ).
Por ello: pique su cemento, deje las hojas allí dónde deben estar, en el suelo, volviéndose depósito de calor neutralizado, nutrientes para que nuestro planeta pueda producir agua, aire y comida también para nosotros y para todos los bichitos y las plantitas que le colaboran en su impresionante tarea.
No tale, no queme, no destruya las hojas del suelo ni los árboles, sustituya su cemento por árboles grandes y hojas que se volverán una parte de un gigantesco sistema de aire acondicionado que evitará la escasez ( de agua, alimento, etc.) en nuestro planeta y le enfriará gratis su vivienda, evitando, de paso, enfermedades, polvo, etc.
¿Quiere vivir? Hágalo conforme a lo que la naturaleza nos lo está pidiendo con ímpetu y desesperacón. Toda otra cosa será una muerte inminente y tragedia para todos. La pintura de su movilidad, su piel sana que desarrollará potencialmente un cáncer de piel, su cuerpo que no podrá caminar asoleándose y reaccionará potencialmente con una diabetes, con su cerebro que no funcionará bien a raíz de la falta de oxígeno, su piel que sufrirá el impacto de virus y bacterias que un medio ambiente sano sabría mantener a raya, su billetera que pagará alimentos menos sanos ( con más fungicidas, etc.) y más caros y mayores gastos de energía hasta que incluso el agua potable se vuelva un lujo carísimo…
Pared verde: elimina ruidos, elimina sustancias que dañan la pintura de su movilidad, su computadora y otros aparatos electrónicos, evita enfermedades respiratorias, cutáneas, de la vista, dolores de cabeza, lavar en exceso cortinas, manteles, etc. y – de hecho – evita mosquitos y otros animales molestos por ofrecer un habitat a animales que precisamente viven de estos insectos ( geckos, etc.).
Evita el uso excesivo de electricidad, puesto que actúa como un sistema de limpieza del aire y de enfriado que sustituye en gran parte o totalmente al aire acondicionado que mantiene sana a su familia y a sus mascotas.